martes, 30 de diciembre de 2014

Feliz y próspero año 2015

Finalizado este 2014, miro atras con la sensación de estar consiguiendo mi propósito.
Casi diez meses desde mi salida en Càdiz y encontrarme en el sureste asiático para celebrar el nuevo y buen año que nos esperará.
La decisión de echarme a la carretera me ha hecho ser alguien más libre y cuidadoso con mis valores.
El tiempo no es oro, es la vida misma, asi que persigue aquello que sientes hacer y dedicale todo tu amor. 
Compártelo todo y rodeate de personas que te quieren tal y como eres.
Aprende de las bonitas personas que de forma causal se cruzan en tu camino. Todo tiene un próposito y la razón siempre será enseñanzas.
Por un mundo más unido y de respeto hacia nuestro entorno.
La bicicleta como medio de transporte limpio y sano.


Laos, Diciembre 2014

España- China
Primera etapa de esta vuelta al mundo en bicicleta.

Abrazos
<3

Tailandia ( camino a Laos)

Y después de poco más de nueve meses en la ruta,alcanzo Bangkok,la capital tailandesa.
Llego poco antes del día de noche buena.La entrada no fue tan caótica como advertían locales y algún que otro ciclista.
Solo una carretera nacional une la costa con la ciudad y después de empujar la bicicleta seiscientos kilómetros con viento en contra,unos cuantos camiones y coches extras no me molestan,solo quería descansar un poco.
Mi despiste de no amarrar las cosas en la bici,hizo que perdiera un pantalón y mis adorables usadas sandalias.
El mismo tipo que me vendió en un puesto callejero las zapatillas que usan los monjes,me describió como llegar al centro,dándome como referencia el famoso templo Wat Phon.
Sin mucha dificultad llegué y aparcando la bicicleta dentro con la atenta mirada de los turistas,me comí casi el kilo de mandarinas que compré en la mañana temprano.
Para este tipo de templos hay que pagar entrada,pero de alguna manera terminé entrando gratis y con la bicicleta vigilada de primera mano por los agentes de seguridad.
Fue impactante ver semejante estatua de Buda acostado con una anchura de cuarenta y seis metros encajada casi milimétricamente en la sala.Los alrededores eran jardines y pagodas aunque no duré mucho.La cantidad de turistas me contradecía en relación al silencio que llevo contemplando en todos los templos desde el sur de Tailandia.
Al poco,Lieke,la que fue mi compañera de viaje días atrás,me avisa que esta cerca por lo que nos encontramos y aprovechamos para compartir hostel.
Durante par de dias,visitamos parte de la ciudad,y es que para este lugar necesitas al menos dos semanas.
Callejeando,viendo mercados locales,visitando monasterios y explorando nuevas comidas.
A la fiesta se unió Víctor,un gran amigo español que conocí en Krabi.Viajero que lleva consigo el Yoga como filosofía de vida allá donde vaya.
El día veinticuatro en la mañana abandono la ciudad,cuatro días fueron mas que suficientes para volver a sentir estar en sitios mas tranquilos.
Mi plan era subir hasta Vientian,la capital de Lados,entrando por la frontera que está totalmente pegada.
Estos casi ochocientos kilómetros no pudieron presumir de grandes paisajes ,a excepción de un paso pequeño de montañas que hay en la mitad sur.
El viento reinaba de nuevo ,haciendo que pedaleara lentamente,esto provoca un doble esfuerzo por lo que me convertía en el mejor cliente a cada puesto de fruta que me encontraba.
Soy algo despistado para recordar nombres,pero sobre todos para los nombres exóticos que tiene la fruta aquí.Siempre llevaba mi portamaletas traseros con algún gran rácimo de bananas o alguna que otra buena cantidad de mandarinas o fruta dragón.
Estaba teniendo bastante suerte con el tiempo.A pesar de ser estación seca,estaba disfrutando de toda tailandia con ni siquiera un mínimo chaparrón en el norte.
Los habitantes a medida que te alejas de los típicos lugares de visita guiada,se convierten en verdaderos anfitriones cuando te ven algo sucio y con cara de comerte lo que sea.
Seguía usando los templos como lugar seguro y cómodo donde pasar las noches.
Me sentía fuerte y muy motivado a esta altura del viaje.En mente estaba el tipo de ruta que quería llevar a cabo en los próximos meses.
Una opción era cruzar norte de Tai hasta Laos donde bajaría hasta Camboya para entrar en Vietnam.
La opción que sentía hacer era la de continuar hacia el norte cruzando parte de china,pero para ello,todo dependería de la suerte en las embajadas chinas tanto en Vientian como en Hanoi.
Aceleré un poco el ritmo los últimos dias de tierras tais ,con pena de acabar este país pero queriendo ser práctico y no tener que esperar los días festivos de vacaciones de los consulados en Vientian.
Rusa y Jacob,dos compañeros de Manchester ,me dieron sus coordenadas y justo estábamos a sesenta kilómetros de distancia.Me esperarian en una bonita reserva natural de serpientes,donde era frecuente conocer biólogos de cualquier parte del mundo.Allí fui recibido con gratitud y con gran almuerzo.Estos chicos los conocí en Georgia unos cinco meses atrás.
Me contaban de nuestro otro amigo de pedal Mark,que se encontraba en Vientian y que podría verlo también.
Es curioso como recorriendo parte del mundo,por lugares completamente distintos,termines encontrándote con antiguos amigos.Esta sensación es realmente bonita ,la cual crea lazos de unión especiales.
Por fin ,las mañanas son algo mas frescas y las noches también.Disfrutar de estos cielos libres de polución y por lo tanto completamente estrellados,eran no menos que regalos para contemplar tumbado desde una hamaca.
Nong Khai,lugar fronterizo,ya aparecían en los carteles,por lo que llegaría a tiempo para pasar la noche vieja y tramitar mis visados.
Finalizando Tailandia,un país que me a ofrecido inolvidables experienciasy lugares maravillosos,quedaba atras para dar paso a Lados,mi vigésimo cuarto país en este viaje.
Feliz año 2015 !!

lunes, 22 de diciembre de 2014

Visados (II)

Continuando la información acerca de los visados que he necesitado durante mi recorrido,aquí dejo un poco detallada los pasos desde Irán.
Una vez que crucé Iran por el Golfo Pérsico hasta los Emiratos Árabes, el único trámite es un simple sello en el pasaporte( U.E) que te permite visitar el pais en un plazo de un mes.
Para mi cruce a Omán, el trámite también fué sencillo. Directamente en la frontera, te sellan pasaporte dándote a elegir entre visado de tránsito por diez dias ( 10 euros aprox.) o el visado de un mes( 40 euros aprox.).
A continuación , mi salto a Indonesia fue un poco mas de lo mismo. Si el visado lo arreglas On Arrival( directamente cuando aterrizas en aeropuerto), el coste es aproximado de treinta euros con limite de un mes. 
Cuando lo gestionas cruzando frontera por tierra, tengo entendido que requiere de trámites mas detallados.
Yo tuve que extender el visado indonesio, lo hice en Sumatra . Coste de aproximados 20 euros y necesitas de una reserva de vuelo para garantizar que abandonaras el país en el limite establecido.( ojo con la corrupción de los agentes de inmigración), te haran pagar más si quieres tener la extensión en mismo dia. Yo me negué , ya que no promuevo este tipo de hábitos.
Singapur, un simple sello a coste cero euros con limite de tres meses.
Lo haces en la misma frontera.
Malasia, al igual que Singapur, te ofrece noventa días sin coste alguno y directo en la misma frontera.
Para Tailandia, tienes tres opciones.
1- Si llegas en avión, tendrás un mes.
2-Si lo arreglas en misma frontera, el plazo es corto, solo quince días.
3-El elegido por mi, tramitàndolo desde otro país, tendras dos meses.
En Malasia puedes hacerlo o bien desde la capital, Kuala Lumpur, o desde la isla de Penang. El coste al cambio en euros vino a ser unos 23 euros y lo tendràs listo para la tarde del dia siguiente.
Desde Bangkok .Un saludo

domingo, 21 de diciembre de 2014

Tailandia(primera parte)

Después de cambiar una vieja chaqueta por una almohada,gasto mis ultimas monedas malayas en comida musulmana.
Mi séptimo país islámico queda atrás para dar paso a una nueva cultura y religión,la budista.
El agente de inmigración me ofrece una toallita perfumada y refrescante y me aconseja no pedalear en la noche ya que los algunos conductores de camiones les da por beber ,y no precisamente agua.
Me dirijo a Hay Ya,por la única carretera convencional visible en mi mapa.Al poco de caer un mini diluvio,contemplo cada vez mas cerca una estatua gigante de Buda posada en el techo de un bonito y mas que decorado templo.
No soy una persona religiosa,pero desde hace muchos años ,la cultura budista me ha enseñado ciertos valores,los cuales recibo a modo de filosofía de vida.
Volvía a llover de manera muy intensa y mi casi estrenado pantalón de ciclismo,empezó a provocarme severos roces que me hicieron pedalear casi veinte kilómetros sin poder sentar.
Pasé dos días en Hay Ya,tratandome las heridas con áloe vera y visitando un poco la ciudad.
Tuve mi primer contacto con estudiantes a monjes.Para llegar a ser monje,se debe hacer unos estudios y practicas,durante seis años.Internados en monasterios,la carrera del auto conocimiento a través del estudio y la meditación ,permitirán a estos aspirantes a poder enseñar y transmitir la palabra de Buda a siguientes generaciones.
Optando por carreteras mas tranquilas,vuelvo a bajar un poco pero con la excusa de recorrer un parque nacional del sur a mi camino a Krabi.
Tenia curiosidad por pasar alguna noche en templo.Pasando el día entre bonitos paisajes y la mirada no muy atenta de los locales,observo casi con la puesta de sol,un cartel con la silueta de una pagoda.Un pequeño camino de tierra me conducía a un viejo templo que estaba en fase de remodelación.Sin saber muy bien como,me acerque y pedí permiso para pasar la noche.
De inmediato aceptaron y me ofrecieron colocar mi casa de tela en el lugar de rezo.
A diferencia de los cinco rezos diarios por parte de los islámicos ,los budistas son dos.Uno sobre las cinco de la mañana y otro sobre las siete de la tarde.
Los monjes tienen solo dos comidas al día,desayuno y almuerzo.Cada mañana,dentro de su bolsa de tela color ocre,portan una olla donde los vecinos del templo,rellenan con arroz.También locales acuden a dichos templos a entregar comida a modo de ofrenda,incluso decorándola con lazos de regalo.
A partir de esa noche,el dormir de ese modo,se convertiría en casi un ritual en mi estancia por mi paso en sureste asiático.
Hacia el norte,la costa oeste fue la elegida,esa área esta influenciada aun por musulmanes procedentes de Malasia por lo que las mezquitas siguen decorando el suroeste tailandés.
La comida es rica y algo variada.El mi móvil tengo anotado y traducido mi plato estrella,arroz con verduras,huevo y a ser posible con un poco de ajo.Normalmente lo compro a un precio de entre treinta y cincuenta Bahts,que viene a ser alrededor de un euro.
Alcanzando Krabi,pregunto en una gasolinera por la playa Aonang y después de pedalear media horita mas entre montañas de cimas redondas ,logro llegar.La primera impresión fue casi de susto,ya que veía mas turistas que locales.Pensaba en un pequeño descanso antes de mi subida a Bangkok,por lo que después de contratar un pequeño barco para ver algunas islas,busqué un hostal barato.Creo que di con el más económico de la zona,en torno a cuatro euros la noche.
Fue allí,donde conocí a Mariano,Margot,Víctor,Máximo y Belly.Un grupo de viajeros que pronto hicimos amistad.
Al día siguiente,bajo un cielo despejado y un sol radiante,tengo la suerte de visita las islas Phi Phi,que pese a estar algo saturadas de turismo en masa,no deja de ser una de las islas más bonitas del mundo.
Me aconsejaron de ir a conocer Railay,playas vecinas a la que yo estaba y así hice.Alquile una tradicional barca de proa pronunciada y en escasos veinte minutos estaría en la que a mi parecer,seria uno de los lugares mas bellos que he conocido,paisajisticamente hablando.
Mariano,mi nuevo amigo italiano,aparecería poco después y juntos navegariamos en kayak por los alrededores,disfrutando de unas vistas dignas de las mejores revistas de viaje.
Pasados cuatro días,y con el cuerpo algo apalancado,decido de volver a subirme en la bici.
Con un ritmo tranquilo,veo aparecer frente a mi a una chica sobre una bici.Lieke ,holandesa que decidió cambiar de vida por una temporada indefinida,se convertiría en mi compañera de viaje por varios días.
Juntos disfrutamos de lo que a veces se echa de menos cuando se viaja en solitario,el compartir los maravillosos momentos que te ofrece la vida nómada.
Costeando el oeste hasta alcanzar Ranong,frontera con Myanmar.
Lieke,descubre la facilidad y las comodidades que te aporta el hecho de dormir en los templos,por lo que no dudará en ponerlo en práctica durante su viaje por estos lares.
Una vez que cruzo al lado este,lo que me esperaría no sería otra cosa que emborracharme un poco de viento durante los próximos seiscientos kilómetros.
Son frecuentes los encuentros con ciclistas,destacando la pareja francesa que viajaban con sus dos hijos pequeños y la pareja de padre e hija de Florida que recorrían un trayecto similar al mio.Estos encuentros fueron especiales para mi.
Con el cuerpo algo destemplado ,tomando algo de paracetamol,el ritmo se hace algo mas lento.
Invitado a pasar la noche en una guardería ,me repongo de lo que podría haber llegado a ser una gripe.
¿Gripe a veintiséis grados en diciembre? Durante nueve meses encima de una bicicleta,el cuerpo se me ha hecho mucho mas inmune a todo,sin padecer nada medianamente serio en todo el camino.Pero como se suele decir,cuando toca,toca.
A tan solo setenta kilómetros de la capital,reflexiono acerca de mi viaje,recordando que era Tailandia a primeras,mi destino final.Todo cambia y cualquier tipo de plan ,es en vano.Mi próximo país será Laos,y mientras a seguir disfrutando de la caótica pero sencilla tailandia.
Con un último spring rodeado de centenares de camiones que me acarician y con el sonido de otros tantos claxons,llego a Bangkok,mi parada mas prolongada en Tailandia.
Aquí pasaré varios días para mezclarme con los hábitos de la gran urbe asiática.
Pasando las navidadades con otros viajeros y disfrutar de una cena improvisada con palillos en vez de tenedor.
¡Felices fiestas ¡

sábado, 29 de noviembre de 2014

Singapur y Malasia

Con mi bicicleta atada en la popa del barco,paso aproximadamente ocho horas con tapones en los oídos para minimizar el ruido de los motores.Después de un par de películas sin entender nada y una siestecita,por fin llego a Batan,la isla que me separa de Singapur a otra horita de ferry ,pero esta vez de silencio y con aire acondicionado.
Casi de noche,paso por aduana y sin problemas,un nuevo sello me permite noventa días de estancia.
La primera impresión fue impactante,ya que de la primitiva Sumatra pasaba a la ciudad de rascacielos y tecnología punta.
Permanecí solo tres días,suficientes para mi en este tipo de urbes.
Gracias al detalle de un compañero ciclista,Ramón me acoge en su piso,evitandome así los caros hoteles.
Singapur,que hace cincuenta años pertenecía a Malasia,quiso independizarse por asuntos políticos y a su vez queriendo ponerse a la cabeza de los países mas modernos y quizás civilizados también.
Es considerado como unos de los países más seguros y limpios.Esto ultimo se refleja en el ejemplo de que te multarian si te ven mascando chicle.
Mis días los aproveché paseando tanto andando,que es lo que suelo hacer cuando me hospedo al menos dos dias,y también en bici,porque es un pais-ciudad que no es peligroso a nivel de trafico.
Disfruté con mi visita al barrio chino,a la zona de little india y a contemplar sus rascacielos con arquitectura que están a la vanguardia.
Allí,se mezclan distintas religiones y culturas.
Podría decirse que la ciudad se divide como en distritos,definiendo un poco la cultura que habita en ella.
Por lo general es un lugar no muy barato para los turistas.Mis comidas las hacía en el barrio chino o en alguno de los puestos de comida callejera.
Podría calificar a Singapur como un país burbuja,es decir,viven totalmente al margen o fuera de contexto de lo que representan sus paises vecinos como son Malasia e Indonesia.Un paraíso de la tecnología y el puro marketing.
Pasados esos días,preparo mis bártulos y un domingo bien temprano me dirijo hacia la frontera con Malasia.
Treinta kilómetros tuve que recorrer para llegar al puente que separa ambos países.
Tuve que bordear un bonito parque natural y al ser último día de semana me encontraba muchos ciclistas a mi paso que aprovechaban su día de descanso y disfrutaban del menos intenso tráfico.
Una cola de centenares de motos se aglomeraban en el puesto fronterizo.Pasada la barrera me acerco a la malaya.
Normalmente los agentes de las fronteras ,no es que luzcan un carácter muy afable,pero en ésta el chico se interesó mucho por mi viaje poniendo otro nuevo sello para otros noventa días.
Malasia la decidí recorrer por su cara oeste,ya que en la Este llovía mucho y el viento intenso siempre seria en contra.
Carreteras seguras y conductores que mayoritariamente me respetaban .Eso me permitia recorrer buenas distancias cada día.
El monzón,pese a que llovía menos,no dejaba de empaparme a ratos cada tarde.
Volvía a viajar solo,mi compañero Tom y yo seguíamos rumbos similares pero a distinto ritmo.
Malvasía se constituye de tres culturas principalmente.La que cubre el ochenta por ciento es la islamica,luego a parecidos ratios compartirían la hindú y la china.
El país inundado de templos de cada religión,me ayudaban a pasar las noches en las que la lluvia me advertía para buscar un techo.
Notaba la diferencia respecto a Indonesia,y es que aquí parece ser que ven a turistas con mas habitualidad,ya que no percibía apenas la atenta mirada o el gesto impulsivo por acercarse a mi.
Varios cicloturistas me encontraba tanto en mi dirección como en la contraria.Este es un pais de paso,tanto el que viaja hacia Tailandia como el que va rumbo Australia o Nueva Zelanda.
Para entrar en Tailandia,debía elegir entre arreglar mi visado en la capital,Kuala Lumpur o en la isla de Penang.Opté por la segunda debido a los censejo que leía en foros viajeros.Kuala no es lugar apropiado para ir en bici.
Cuanto mas viajo,más necesito de tranquilidad y poco ruido.Será que me vuelvo más sensible.
Poco antes de llegar a Penang,después de saludar a un malayo que viajaba desde China ,me encuentro con una bonita pareja que tomaban un desayuno.Paré y nos presentamos,ante la sorpresa de que ella era española y su chico alemán..Su viaje seria durante medio año alrededor del sureste asiático,combinando el ciclismo con su pasión por la escalada .
Teníamos misma ruta por lo que compartimos kilómetros hasta el norte ,donde nos separaríamos.
Con mi visado tailandés arreglado en Penang de un día para otro,con un coste de veintitrés euros al cambio y una estancia de dos meses,voy finalizando mi vigésimo segundo país de este viaje.
Por otro lado también ponía fin a mi último o de los siete países musulmanes que pese a no compartir en absoluto sus creencias y regimenes,no pararé de dar las gracias por la generosidad y hospitalidad recibida a lo largo de estos meses.
A un día de cruzar a Tailandia,mi bicicleta Duna cumple sus primeros catorce mil kilómetros.
Recuerdo con anhelo,el tiempo de preparación antes de partir a este viaje.Recuerdo cómo investigaba acerca de otros viajeros y la admiración que depositaba en ellos por lograr sus propósitos.
Tengo la sensación de que comencé mi viaje justo ayer y eso pienso que se debe a que vivo cada dia de manera muy intensa y con una incertidumbre que me hace sentir realmente vivo.
Preparado,emocionado e ilusionado para alcanzar la cultura budista.Aquella que tomo como filosofía de vida y de la que pienso aprender todo lo posible durante los meses que pedalearé en el resto del sureste asiático.

viernes, 14 de noviembre de 2014

Hacia el Este Sumatero

Mis ruedas volvían a circular por el hemisferio norte.
Paisajisticamente hablando,la mitad norte recobraba la verdadera belleza indonesa que deambulaba en mi imaginación antes de visitarla.
He tenido la suerte de conocer personas que me han mostrado lugares escondidos y poco conocido por los pocos turistas que por aquí pasan.
Exótico era el calificativo para definir sitios que me han dejado con la boca abierta.
Casas de techos puntiagudos orientados al cielo,los cuales sirven también como almacenes de arroz.
De Padang llegué a Bukkitingui.Allí me esperaba Mimi,una señora que regenta un puesto de comida a la entrada del zoo.Es cuidadora de Botti,un mono de dos años que tristemente perdió a su madre.
Cuando quieren darte a entender la positiva manera por la que ciertos animales están enjaulados,no siempre es así.
Estoy completamente en contra de enjaular sin motivo puramente necesario o por algún tipo de cuidado.
Mantuve conversación con algunos empleados que queriendo expresar su involucración,trataban de transmitirme el por qué de la estancia de ciertos animales entre barrotes.
En Indonesia existen muchos cazadores furtivos,tanto para pieles,como para mercado negro de animales exóticos o como exterminio de ciertas especies que habiten en determinadas áreas que urja talar por el motivo que sea.
La mirada de un leopardo muerto en vida ,al que le adjudican una vida de prisionero en una jaula de veinte metros cuadrados o el caso de dos elefantes con tobillo encadenado veintitrés horas al día ,esperando su baño diario público bajo la atenta mirada de locales y turistas que de manera ignorante aplauden sus trucos de bailes para mayores propinas.
Sumatra dispone de una cordillera interior que atraviesa casi toda la isla.Una vez pasada el camino se vuelve en un continuo sube y baja de peque las pendientes que aunque hagan el trayecto más ameno,el tráfico imprudente me deja con los hombros sobrecargados de tanta tensión que me provoca el estar continuamente pendiente de cuánto de cerca me pasará el siguiente camión.Han sido tres veces las que he tenido que salir rápidamente de la calzada antes de ser embestido por conductores que anteponen un minuto menos en su reloj a la vida del que circula tranquilamente por el carril correcto.
El estado de las carreteras es aceptable aunque con muchas imperfecciones creadas por camiones y buses pesados y con ciertas ganas de llegar a Dumai,recorro unos cien kilómetros diarios.
Este país me ha regalado muy buenos momentos ,aunque por otro lado,me considero una persona muy tranquila y aquí la gran atención que he tenido me ha hecho carecer de eso.
Disponía de dos opciones para dejar Indonesia.Una de ellas era tomar barco directo a Malaka,ciudad malaya cercana a la capital Kuala Lumpur.La otra opción era bajar mas al sur y conocer Singapur .Opté por esta segunda ya que es una ciudad interesante y también me ofrece la oportunidad de recorrer Malasia en su totalidad .
La comunicación con los indoneses no ha resultado difícil.Siempre intentan entender que estas pidiendo y también intentan ayudarte aunque no conozcan la manera exacta de hacerlo.Para todo hay un "yes yes".
Son muy hábiles a la hora se solventar algo ,ya que al carecer de medios,la imaginación la desarrollan bastante bien.
He podido ver cientos de ingeniosos trucos o reparaciones de cosas en mal estado.Contraria al mundo occidental,donde nada se arregla y todo se tira sustituido por nuevo.
Comienza mi vigésimo primer país cumpliendo trece mil kilómetros rodados.
Ocho meses de viaje que me abren los sentidos para seguir conociendo este mundo .
Desde el puerto de Dumai,Este de Sumatra,un ferry con duración de ocho horas y con un altísimo ruido de motor ,me dejaria en Batan,para tomar un segundo hasta el puerto de la megapolis Singapur.